miércoles, 16 de octubre de 2013

Las mejores pintadas están en las paredes de los garitos. El Cubanito, como buen pub de cubanos, encumbra esa costumbre


Opiniones sobre la costumbre de garabatear en las paredes podemos encontrar muchas y variadas. Las que sostienen que es puro gamberrismo hasta las que descubren verdaderas obras de arte. En mi opinión, las mejores pintadas están en las paredes de los garitos. Se trata de extractos de historias con poco más de unas palabras para expresar alegría, euforia o, lo más seguro, los jadeos del alcohol. El Cubanito, como buen pub de cubanos, encumbra esa costumbre.


“apretado como culo de muñeca” firmado por “Br 1 Uruguay”. Vale, un orientalito. Imagino que una noche donde han abundado los mojitos y, quizás, exuberantes traseros caribeños, terminó añorando alguna “muñeca de látex”. Hombres corrientes, pero buenos contempladores de vicios terrenales, acuden  a las expresiones de sus ídolos, mezclando palabras para describir circunstancias: “la vida es aquello que pasa mientras haces planes”, expresión muy de John Lennon y del que está hasta las cejas de mojitos y decepciones.


Si permites que las paredes de un pub la puedan grafiar, pasado un tiempo tendrás que pintar nuevamente el interior del local o creer que tienes una muestra de sentimientos, o pensar que conservas el cariño de esa parte de la sociedad que le gusta ir por bebida y aventuras, en noches que terminan por olvidarse o no querer recordarlas, según el caso. Existen garitos que quieren controlar esas muestras de espontaneidad, permitiendo escribir solo a según quién y según dónde… Pero están los que hacen la vista gorda y las paredes terminan convertidas en murales ajenos al orden, fuera de toda ley, lo mismo gramatical que de urbanidad. Estos son los garitos imprescindibles.



1 comentario:

No se permiten chorradas... de ningun tipo.